Los trabajadores del Metro de Caracas exigen a la empresa que cumpla sus obligaciones para que entre en vigencia su contrato. La respuesta ha sido una oferta por debajo de las expectativas
Los trabajadores del Metro de Caracas trancaron ayer en la mañana la avenida Francisco de Miranda a la altura de Chacao. Lo hicieron para exigirle al presidente de la empresa y al Ministerio de Infraestructura que cumplan con los requisitos legales que se requieren para que su contrato colectivo entre en vigencia y puedan obtener un aumento salarial.
Los empleados del transporte subterráneo tienen más de tres años devengando el mismo salario, que consideran insuficiente para cubrir sus necesidades básicas.
Sin embargo, muchos estaban aliviados en diciembre del año pasado, porque ya habían hecho el depósito legal de la convención colectiva.
Este contrato establece que la masa laboral recibiría un aumento de Bs. F. 400 en el salario, más un incremento de 35%. Sin embargo todo quedó en el papel, por lo que los trabajadores tomaron acciones de calle el jueves de la semana pasada y ayer para denunciar públicamente su problemática.
Explicaron que el presidente del Metro de Caracas, Claudio Farías, no ha querido llevar a cabo lo establecido en la contratación, pese a que ésta fue homologada en diciembre pasado con la firma del viceministro del Trabajo. Además, este mismo despacho anuló el acto de homologación un mes después.
Estas decisiones fueron tomadas, pese a que en la discusión del contrato participaron la Procuraduría General de la República, y los despachos de Planificación y Desarrollo, y de infraestructura.
Ahora, el Ministerio del Trabajo exige que para que la convención entre en vigencia es necesario que sea llevada ante el Consejo de Ministros. "Por eso venimos acá a exigirle que lo hagan, eso es competencia de la empresa y del Ministerio de infraestructura", dijo Pedro Coronado, presidente del sindicato de los trabajadores del Metro de Caracas.
UNA BURLA SALARIAL
El dirigente informó que Claudio Farías en vez de cumplir con los requisitos legales exigidos para que se haga efectivo el contrato, les hizo una "seudo oferta" a los trabajadores para que abandonaran sus reclamos.
La propuesta fue un aumento de Bs. F. 200 en el sueldo, más un incremento de 30%. "Lo que se está proponiendo acá es una burla a los trabajadores, y es un antecedente sumamente peligroso para la negociación de las futuras convenciones colectivas de las empresas públicas y privadas. Si se echa para atrás la primera convención, por ahí van a caer las demás", aseguró.
Por sus acusaciones, los voceros han sido acusados de "guarimberos" y han recibidos amenazas telefónicas y vía electrónica. Coronado indicó además, que siempre están siguiéndolo y tomándole fotos en todas sus actividades.
Hoy tienen planeado llegar hasta la AN para seguir peleando por sus reivindicaciones, sin llegar a la huelga. "No vamos a tocar el servicio comercial, los usuarios no son culpables de los errores administrativos que cometen quienes dirigen esta empresa", aseguró.
CRISIS EN VALENCIA
Por otra parte, el diputado Francisco Torrealba denunció a través de un comunicado que en el Metro de Valencia se originó otro conflicto laboral, por represalias a los trabajadores que decidieron conformar un sindicato.
Aseguró que el presidente del Metro de Valencia, Yomar Parra, ordenó el despido inmediato de aproximadamente treinta empleados que se estaban organizando para defender sus derechos. Además se les acusó ante la Fiscalía por constituir supuestamente una amenaza para los usuarios.
Prensa Tal Cual
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