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Éste jueves, la desorientación de los usuarios fue tal que muchos no sabían en cuál estación se encontraban, pues los operadores -por radio- los hacían bajar de un vagón y subir a otro sin mayor explicación. 

En La California, Plaza Venezuela y Agua Salud, fue donde más hubo retrasos y molestias. Incluso los operadores del sistema tuvieron que auxiliar a varias personas sofocadas y con síntomas de desmayo. 

En medio de esa corredera, los pasajeros se quejaban del mal servicio y denunciaban que "todos los días es algo diferente". Citaron, por ejemplo, que la mayoría de las veces dejan a los vagones viajar sin aire o los detienen en medio de los túneles sin aparente causa. 

En el caso de ayer el bululú también afectó la Línea 2. Incluso hubo pasajeros que tardaron -según sus comentarios- hasta dos horas tratando de llegar a sus destinos. 

En todo momento los trabajadores del transporte subterráneo negaban que la situación se tratase de una operación morrocoy. 

El Metro de Caracas emitió un comunicado donde aclara que la causa de las fallas de ayer "deriva única y exclusivamente del agotamiento del sistema" por tener 26 años ininterrumpidos de operación comercial, y a la demanda de dos millones de usuarios diarios.  Cadena Global/Ultimas Noticias 

Prensa: cadenaglobal